Traducción: Željka Lovrenčić
BLUES PARA EL ESTADO Y PARA EL INDIVIDUO
(Blues za državu i pojedinca)
1.
La conexión es un número.
Orden seguro.
Donde el papel absorbe mis ojos,
y me devuelve
la mandarina china.
Innumerables sueños potables, sin color.
Las ardillas callan.
Los predadores del mar
atacan bajo la cintura
sólo la niebla está
en nuestra boca.
¡Estado, protégenos!
Danos
inocencia duradera
y sayal
en vez de salones
de belleza.
Y cenizas,
en vez del rimel.
Duerme
a todos los que piensan
y despierta a aquellos
que trabajan
en las contabilidades
de las grandes empresas.
Allá se almacena
el magma vidente,
positivismo cegado,
arveja escupida.
Los coribantes siempre
cambian la piel.
Ahora vibran
sólo los flecos
de los abrigos de terciopelo
y suben al cerro
montones de pavos
en esmoquin.
Todas las radioemisoras
han sido ajustadas
para que susurren siempre
buenas noches.
2.
Carismáticamente lisa,
seguramente cómoda
subconsciencia.
Los martes se ejercita
el insomnio,
el apartamento está sucio
por palabras que no se pueden ventilar,
la secadora del pelo retarda
la indecisión.
“¿Llegaré a tiempo?”
se pregunta
la trepadora distraída.
¡Sólo hecha raíces
que floten, que floten!
El mediodía está congelado
como cascada,
sin cambiado en la escritura
digital,
dura como el golpe
de la campana de algodón.
LOS ANTEOJOS FELICES
(Sretne naočale)
Antaño gustabas del silencio.
Podías descansar
en la palma de su mano,
absorber su tranquilidad.
La gente era tranquila.
Las gentes eran unidas,
mansas gatas dormidas.
Los años eran jóvenes,
brote de lirio,
por la mañana se viajaba
a Holanda o a Reikiavik.
¿Dónde están ahora
nuestros anteojos felices?
¿Dónde está la pluma blanca
De los cisnes enamorados
Y las misericordiosas torres
de
Chartres?
La ausencia tiene forma de
cuerpo, y el invierno corre
al ritmo de leche regada.
CEREMONIA
(Svečanost)
Ahora sé
donde está la ceremonia:
cerrada
en el pequeño libro blanco.
Se descubre
sólo en la primavera
en el vuelo de las golondrinas,
al anochecer,
a través de la nata color violeta
del crepúsculo.
Entonces ocurre
un encuentro importante:
las rosas con sus flores,
los árboles con el follaje,
las manos con el tacto.
Como el potrillo
inclino la cabeza,
segura de que todavía no
he visto
esta noche.
LISTA DE LAS PÉRDIDAS EN LA VIDA
(Popis životnih gubitaka)
Esos zapatos
que me han abandonado.
Aquellas camisas
que tiré porque tenían
los cuellos demasiado
grandes
y aquellas que he regalado
porque tenían los cuellos
demasiado pequeños.
Aquellos botones
que perdí
abriéndome camino
en el tranvía.
Aquellos jardines
que no sallé.
Aquellos brotes de bambú
que se marchitaron
porque no los regué
y aquellos ficus
que se han podrido
porque los regué demasiado.
Aquellas habitaciones
que he dejado antes de tiempo
y aquellas que
he abandonado
en los malos tiempo.
Aquellos días
que pasé dormida
y fueron apaciblemente tristes,
como el reflejo del cielo
en los charcos.
Aquellos conciertos
que escuché
distraída
y esos nombres
que la gente
calló.
Aquella niebla
que dejé de
hervir,
los pasteles
que escaparon
mi avidez,
aquella gente que
no conocí,
aquel momento
que puse
en el bolsillo roto.
BULGARIA
(Bugarska)
Iré a Bulgaria.
En el centro comercial
compro un vestido
para Bulgaria.
(Negro, plisado, serio.)
De Bulgaria me llegan
correos electrónicos
en búlgaro y en inglés.
(Leo aquellos escritos en inglés,
apenas descifro la letra cirílica.)
Espero el boleto para el avión.
Espero el día en que iré
A Bulgaria.
En el periódico está escrito:
mataron a un
escritor búlgaro.
Lo mató la mafia.
Estoy repitiendo lo que sé
de Bulgaria:
Mar Negro, Balcanes,
Unión Europea.
Bulgaria huele a rosas.
No sé nada de Bulgaria.
De la antología poética Pamučno zvono (Campana de algodón)
ISLAS NAVIDEÑAS
(Božićni otoci)
¿Por qué no nos vamos
a las Islas Navideñas,
huyamos
de la oscuridad y del frío
sobornemos el Sol
que siempre
nos amenaza
con el mordisco dorado?
Amor,
dibuja para mí
esas islas,
siémbralas las en el mar,
con amplio y
azulado gesto,
para que germinen
como el corazón en el lápiz,
como el verde
en el iris
de Santa Lucía.
CITAS
(Citati)
Desde ahora
sólo buscaré citas,
dicen: ya todo está dicho,
sólo hay que encontrar
quién, cuándo y dónde
dijo aquello
que justo ahora pensamos,
que sentimos,
que tememos,
que desearíamos;
sólo hay que ponerse
en los zapatos ajenos,
escarbar la billetera ajena,
utilizar
fotografías felices
de alguien
en luna de miel
o de la fiesta de cumpleaños,
del bautizo, de la Confirmación,
de la extremaunción.
La muerte en verdad
es el fenómeno más democrático
de la vida.
Ni la tierra es exigente,
y los árboles nos buscarán
con sus raíces,
nos abrazarán generosamente
en nuestro camino
hacia la luz.
LOS PASAJEROS Y EL TIEMPO
(Prolaznici i vrijeme)
Por fin,
nuestros pasos
irán al aire.
El cielo se transformó
en una simple cabeza de col
y amenaza con regarnos de
grandes grumos de clorofila.
Y oyes a los transeúntes
como se quejan:
de dolor de cabeza,
alergia, ambrosia
y del tiempo.
Caminan abrumados
y con las cejas fruncidas,
afligidos por el tiempo,
como si el color gris y la lluvia
fueran lo que los enajenara.
Como si el tiempo fuera
un gran frasco
que hay que llenar
con trivialidades fermentadas,
con las páginas y recortes arrancados,
de souvenirs baratos
que entonces guardan
al menos el recuerdo
de aromas, sabores, colores.
Mira, aquí estamos nosotros:
chiquitos y arrugados,
pálidos en el daguerrotipo
de nuestra realidad pasada,
homúnculos
que mueven las manos
frente a la furiosa locomotora,
caen del ardiente Zeppelin,
flotan por el mar helado
agarrándolo todo,
y hasta la más pequeña ocasión
para hacer
el corte de salvación.
DINERO SUELTO
(Sitniš)
El Sol cada vez más económicamente
echa las monedas,
por ese dinero suelto
nadie se inclinaría
en la calle,
eso no es importante, dicen,
cambiaremos el día
por la ganancia en las casas de juego,
y el canto matutino de la alondra;
por el bono - regalo del lavado del auto,
construiremos
un puente firme
a través del río Estigia
y el viaducto
a través de la inexplorada entrada
a Hades,
ahora ya estamos muy cerca
a Marte,
en nuestras pompas
de jabón,
en nuestras alas
de cera.
CASA DE VERANO
(Ljetnikovac)
Cuando nos vayamos,
las nubes llenarán la casa.
En algún lugar, sin descanso,
al tacto
golpearán los postigos,
erizados
como alas de pavo.
La luz se adelgazara
hasta ser una línea
sobre el alta mar.
Iremos hacia ella
descuidados como chivos.
Nuestra vasija para la leche,
copa, taza de té,
quedarán volcadas
sobre la mesa.
En el umbral, la gata, confusa,
guiñe,
borracha
por la pesadez de la incertidumbre.
De la antología poética Kasno (Tarde)
Ružica Cindori nació en Ludbreg en el año 1961. Se graduó en literatura comparada y filosofía en la Facultad de Filosofía y Letras de Zagreb y luego cursó postgrado de informática, rama bibliotecología. Publica poemas, artículos y reseñas en numerosas revistas y anuarios - Quorum, Republika, Forum (Foro), Književna Rijeka (La Rijeka Literaria ), Podravski zbornik (Anuario de Podravina), Croatian Government Bulletin, Kontura (Contorno) y por La radio de Zagreb. Por mucho tiempo trabajaba como bibliotecaria y ahora es secretaria de la Sociedad de Escritores Croatas. Ha publicado las siguientes antologías poéticas: Lomače zelenila (Las hogueras del verde, 1984), Rez, nezacijeljen (Corte no cicatrizado 1989), Krugovi. Udaljenost. (Círculos. Distancia.,1997), Ludbreški listopad (Octubre de Ludbreg, 2002), Strpljivost (Paciencia, 2006) Grad, šuma, otok (Ciudad, bosque, isla, 2006), Pamučno zvono (Campana de algodón, 2011), Kasno (Tarde, 2011). En el festival poético “El abrazo eslavo” en Varna (Bulgaria), en 2010 recibió el premio “La pluma de plata voladora por “ creación total para contribuir a la comprensión entre los eslavos”. Sus poemas han sido traducidos a varios idiomas - inglés, francés, español, ruso, macedonio, búlgaro. Ž. L.
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